El interno 906 de la empresa Plusmar rozó con una puerta lateral abierta al interno 3044 de Andesmar que una hora antes había iniciado viaje desde Comodoro Rivadavia a Buenos Aires. El choque provocó la rotura de parte de la carrocería del primer nivel del coche ejecutivo y de un vidrio lateral de grandes dimensiones por lo que debió retornar a la terminal.
Ayer a alrededor de las 14, un colectivo de larga distancia de la empresa Plusmar que se dirigía hacia Comodoro Rivadavia rozó a una unidad de la compañía Andesmar, cuando ambos vehículos transitaban en dirección opuesta, por la ruta Nacional 3.
Según informaron fuentes oficiales a Diario Patagónico el roce se produjo en el kilómetro 1.700, cuando el interno 906 -dominio IIY 288- conducido por Nelson Horacio Bravo y al Servicio del Central Argentino, rozó al interno 3044 de Andesmar -dominio KQO 627- que a las 13 había iniciado viaje desde Comodoro Rivadavia hacia Buenos Aires.
Según pudo averiguar este diario, el micro que viajaba desde Paraná, Entre Ríos, a Caleta Olivia con capacidad para 58 pasajeros, tocó al otro rodado en una curva, cuando se le abrió la puerta de ventilación del costado izquierdo trasero de la unidad y siguió viaje sin que sus ocupantes se percataran de lo sucedido.
La fuerza de la colisión y la velocidad en que circulaban ambos rodados, provocó graves daños al interno 3044 de Andesmar, conducida por Andrés Vidal Olguín quien detuvo su marcha al instante para verificar si algunos de los 11 pasajeros a bordo estaban heridos. Por fortuna no hubo que lamentar lesionados, pese a que el choque provocó la rotura del espejo lateral izquierdo, parte de la carrocería del primer nivel del coche ejecutivo y el vidrio lateral que da a la mesada que posee el micro.
Los pasajeros de esta unidad fueron trasladados hasta Trelew en otro colectivo de la firma y luego continuaron viaje a Capital Federal. Mientras, el coche averiado retornó a la terminal de Comodoro Rivadavia donde se vivieron momentos de tensión entre los conductores de ambas unidades ya que el damnificado le reclamó su actitud al otro chofer al no detenerse ante el accidente.
Bravo se defendió del ataque señalando que no se percató de lo ocurrido y que ninguno de los pasajeros tampoco notó lo sucedido, ya que se trató de la apertura de una puerta en el exterior de la carrocería del micro.
Intervino personal policial de la Seccional Primera. Luego de tomar los datos de los conductores, ambos choferes terminaron dialogando para solucionar problemas burocráticos del accidente.
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