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Hugo
RR La primera incursión de Martin Scorsese en el 3D no sólo sorprendió a la crítica y al público por el espléndido manejo de esta tecnología. Más que nada impactó -tomando en cuenta su filmografía, siempre asociada a temáticas duras y violentas- el buen trote que le saca a una historia centrada en un niño que busca dilucidar el misterio detrás de un autómata legado por su difunto padre. "Es posiblemente la película más cercana a su corazón", dijo el respetado crítico Roger Ebert, producto del homenaje al cine que el filme guarda en sus entrañas. Llega al Oscar peleando en 11 categorías. (M.M.)

El Artista

Se estrenó en el pasado Festival de Cannes casi como una inofensiva, encantadora y simpática rareza que hablaba de los últimos años del cine mudo en Hollywood, pero pareciendo efectivamente una película de esa época, es decir, sin diálogos y en blanco y negro. Pero como una bola de nieve en descenso, esta cinta galo-belga del francés Michel Hazanavicius fue creciendo y haciendo ruido, convenciendo de que merecía más respeto y atención. Una que le concedió, sin duda, Harvey Weinstein, el más habilidoso productor (y lobbista) de la industria, quien se la llevó a Estados Unidos y la ha explotado al punto de tenerla ahora compitiendo por 10 Oscar. Y sin ser la más nominada, se perfila como la gran ganadora de la noche.(Marcelo Morales).

El Juego de la Fortuna

Con seis nominaciones llega esta película que en apariencia asoma pequeña, pero cuyos personajes engrosan una historia hecha con grandeza y pasión. Las mismas que mueven un deporte como el béisbol, el más popular de Estados Unidos. Dirigida por Bennett Miller y protagonizada por un sólido Brad Pitt, que pelea gracias a su rol un Oscar como mejor actor, suma además secundarios notables, como los que encarnan Philip Seymour Hoffman y Jonah Hill. La cinta muestra al mánager de un pequeño equipo que lo apuesta todo a un inédita estrategia para conformar un plantel competitivo que le haga el peso a los grandes de la liga. Peter Traves de Rolling Stone dijo "es uno de las mejores y más viceralmente excitantes películas del año". (M.M.)

Caballo de Guerra

En los meses previos a la I Guerra Mundial un joven inglés, hijo de una madre esforzada y un padre caído al frasco, adopta un caballo que resulta obligado a partir al frente de batalla. Y el muchacho va tras él. Todd McCarthy, crítico de The Hollywood Reporter, definió la cinta de Steven Spielberg como un espectáculo lacrimógeno para todo público, de gran factura, como la industria solía hacerlos; mientras Joseph McBride, biógrafo del cineasta, la inscribe entre sus obras mayores. El caso es que esta cinta finamente ambientada, de marcado sentimentalismo e irreprochable factura, será un comparsa: con Spielberg ausente de la nómina de directores, no tiene chances en la categoría principal, aunque en las secciones más técnicas pueda tener algo que decir. (P.M.)

Los Descendientes

Desde que estrenó Las confesiones del Sr. Schmidt el 2002, el nombre de Alexander Payne se ha consolidado como unos de los directores más respetados de Hollywood, algo que se corroboró con Entre copas (2004). Con Los descendientes tampoco ha defraudado, con un sobrio estilo que equilibra tintes cómicos con problemáticas que remueven profundamente a sus personajes. En este caso la historia se ambienta en Hawai, un lugar paradis{iaco, pero como bien dice el protagonista (a cargo de un sólido George Clooney, nominado a Mejor Actor) ello no significa que todo sea felicidad. Aquí, el padre de una familia resquebrajada, debe hacerse cargo de sus dos hijas después de un accidente que deja a su esposa muribunda. Llega con cinco nominaciones. (M.M.)

Historias Cruzadas

Cinta de fondo histórico, este filme de Tate Taylor se emparenta con Conduciendo a Miss Daisy, El color purpura y otros llamados a la buena conciencia que han entrado firme a la competencia por las estatuillas. De hecho, a poco de estrenarse asomó como sólida candidata, aun si su estrella se ha ido apagando conforme los reconocimientos de críticos y entidades han ido premiando a otros filmes. Con todo, esta historia ambientada en los 60, que muestra a sirvientas negras cuya dignidad se ve mancillada por sus patronas blancas en el sur profundo de EE.UU., mantiene a firme la candidatura de Viola Davis para quedarse con el Oscar a Mejor Actriz. En otra época, posiblemente, habría corrido con mejores opciones en las demás categorías principales. (P.M.)

Medianoche en París

No está escrito a fuego, pero cuando a un autor consagrado le va bien en la taquilla, sus expectativas oscariles tienden a crecer más que las del resto. Y así le pasó a una figura tan señera como Woody Allen con esta película, que se convirtió en su mayor fenómeno en boleterías gringas. Dejando en claro que aunque el propio Allen esté en la nómina de los directores no tiene opción de repetir la hazaña de Annie Hall , oscarizada en 1978, su aparición en estas listas es una suerte de regreso con gloria. Y si bien cuesta comulgar con los críticos que alucinaron con esta historia de un aspirante a escritor que se enamora del París de los años locos (Owen Wilson), queda claro que aún hay un Woody con los tics de rigor para quien quiera salir a buscarlo. (P.M.)

El Arbol de la Vida

Terrence Malick (La delgada línea roja) tomó las riendas de una película que va de la creación del universo al dolor de una familia de los años 50 que sufre la pérdida de uno de sus hijos, pasando también por la reflexión retrospectiva de uno de sus hermanos, aparentemente, un destacado ejecutivo. Es una cinta visualmente poderosa, impactante y ambiciosa en sus cuestionamientos existenciales, tan caros a un director atípico dentro de Hollywood, con ambiciones artísticas que parecen superponerse a cualquier otro interés. La pelíla ganó la Palma de Oro en Cannes y acumuló elogios que incluso vieron en ella a una obra maestra instantánea. Igual, nada de esto garantizaba su nominación a Mejor Película en los Oscar. Lo logró y suma dos nominaciones más. (M.M.)

Tan Fuerte y tan Cerca

Se estrenó en la Navidad del año pasado. Había hecho poco y nada de ruido, había provocado tibias críticas, pero eso no impidió que un mes después sorprendiera al entrar entre las nueve películas que pelean por el Oscar más importante. Su director es claramente un favorito de la Academia, pues todas sus películas (Billy Elliot, Las horas y El lector) han estado compitiendo por las principales categorías. Basada en un destacado best-seller, la película muestra a un particular niño de nueve años que pierde a su padre (Tom Hanks) en el ataque a las Torres Gemelas el 2001. Buscando en casa, encuentra una llave dentro de un sobre y parte a la búsqueda por Nueva York de la cerradura que esa llave puede abrir. Una cinta que busca sin tapujos emocionar. (M.M.)