RIO GALLEGOS.- Ataviada con un tapado negro calzas y zapatillas, Cristina Kirchner caminó una hora esta mañana por la costanera de esta ciudad acompañada por sus secretarios y seguida de cerca por la celosa custodia presidencial. Eligió un sombrero negro con alas y enormes anteojos de sol para tapar su rostro e intentar pasar desapercibida, pero el despliegue de camionetas a su alrededor y el llamativo atuendo alertó a varios vecinos.
La ausencia total de viento y los 15 grados de temperatura completaban una mañana soleada y perfecta para la actividad física al aire libre, algo poco usual en estas latitudes. La jefa de Estado partió de su hogar pasadas las 11 de la mañana y si algo la convirtió en una vecina más por una hora, fue la compañía del perro de su hija, un pug gris que en un par de ocasiones se enredó con los perros de otros caminantes que también eligieron la costanera local para el paseo matutino.
Según relataron a LA NACION testigos ocasionales de la caminata de la jefa de Estado, ella trató de pasar desapercibida, no cruzó saludos con los ocasionales transeúntes y siempre estuvo acompañada de cerca por sus secretarios y dos camionetas de la custodia. Una la seguía a escasos metros, otra camioneta giraba en torno de las manzanas vigilando la seguridad de la jefa de Estado y procurando que no la sigan fotógrafos ocasionales.
Después de completar diez cuadras sobre la costanera local, regresó por una calle paralela a la costanera, y quedó muy cerca de centro local, incluso pasó por la puerta de una escuela -aquí ya empezaron las clases el 13 de febrero- y a sólo una cuadra de la gobernación y la residencia oficial del gobernador Daniel Peralta, todo un circuito muy conocido por ella, ya que allí vivió los doce años que se extendió la gobernación de Néstor Kirchner.
La jefa de estado se encuentra desde el martes en esta provincia y se estima que extenderá su descanso hasta el martes próximo cuando regrese a Olivos.El miércoles participó junto al vicepresidente Amado Boudou de los actos oficiales por el 135 aniversario del Bautismo del Lago Argentino en El Calafate, donde tuvo palabras elogiosas para la empresa Aerolíneas Argentinas y le agradeció a la comunidad calafatense y al electorado de Santa Cruz el acompañamiento que tuvo en las elecciones de octubre pasado.
En tanto que el miércoles a la noche viajó a Río Gallegos para celebrar ayer el cumpleaños 35 de su hijo Máximo: al mediodía compartieron el almuerzo junto a la ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner y sus hijas. Se estima que hasta mañana se quedará aquí para luego regresar a El Calafate, donde el domingo será el momento de celebrar su cumpleaños