Dr. Guillermo Rougier en la Patagonia argentina Foto cortesía Dr. Guillermo Rougier

El descubrimiento es considerado tan importante que ha sido descrito como una Piedra de Rosetta de la paleontología, que permitirá responder enigmas hasta ahora imposibles de resolver.
"Lo que hallamos fueron restos de dos individuos, dos especímenes de un mamífero fósil de unos 94 a 95 millones de años, al cual bautizamos como Cronopio. Es una especie nueva, no se conocía y pertenece a un grupo extinto", dijo a BBC Mundo el Dr. Guillermo Rougier, autor principal del estudio publicado en la revista Nature.
Rougier, nacido en Argentina, es actualmente profesor de la Universidad de Louisville, en Kentucky, Estados Unidos.
"Lo importante del hallazgo es que ayuda a romper un espacio sin registros fósiles de casi 60 millones de años. Durante el tiempo que llamamos el Cretácico en Sudamérica, se conocían mamíferos que eran de alrededor de 130 millones de años y mamíferos que eran de unos 65 millones de años".
"Este animal nuevo cae más o menos en el medio. Para darles una idea de qué es lo que significa 60 millones de años, es la misma cantidad de tiempo que ha ocurrido desde la extinción de los grandes dinosaurios. Es decir, es una cantidad enorme de tiempo sobre la cual no conocíamos absolutamente nada".
Otro aspecto fundamental del descubrimiento es que se trata de cráneos y mandíbulas. "Los cráneos de los animales contienen gran cantidad de información. Usualmente lo que se encuentran son sólo dientes, pero el cráneo es mucho más complejo. Estos fósiles se van a convertir en una referencia obligada para cualquier trabajo sobre mamíferos antiguos".
Los coautores del estudio son Sebastián Apesteguía de la Universidad Maimónides en Buenos Aires y Leandro Gaetano.
Grandes caninos
Al estudiar un cráneo es sencillo saber si se trata de un mamífero, según Rougier.
Los mamíferos son los únicos animales que se conocen que tienen dientes complejos, con muchas cúspides, explicó el experto. "La masticación es una característica típicamente mamaliana que afecta no sólo a los dientes sino a los músculos de la masticación y estos músculos a su vez dejan impresiones en los huesos sobre los que actúan. Cuando uno encuentra una mandíbula con dientes complejos, con esmalte, con inserciones musculares de determinada forma es muy fácil saber que se trata de un mamífero".
Cronopio era muy pequeño. "Como todos los animalitos que vivieron durante la época de los dinosaurios, en lo que se llama el Mesozoico, particularmente el período Cretácico, este mamífero tenía más o menos 2,6 cms de largo".
Una de las características singulares es que tenía caninos, es decir, dientes anteriores extremadamente grandes y puntiagudos. "Esto es muy inusual en los mamíferos de este tamaño y nos sorprendió muchísimo. No hay un paralelo viviente que nos sirva de referencia y no se conocían tampoco como formas fósiles, así que ha sido una gran novedad".
Es difícil saber de qué se alimentaba Cronopio, pero Rougier piensa que probablemente comía insectos, ya que gran parte de los animales con dientes agudos son insectívoros. Los caninos probablemente le ayudaban en la masticación de insectos y a atravesar caparazones.
El mundo de Cronopio
Los cráneos fueron hallados en la la provincia de Rio Negro, en el sur de Argentina.
Hoy en día es una zona desértica, pero era un mundo muy diferente cuando Cronopio vivía en esta región.
"Hace 95 millones de años esta zona era una zona subtropical con una abundante fauna constituida por dinosaurios carnívoros, dinosaurios herbívoros, cocodrilos terrestres, serpientes con patas, lagartos. Sabemos que existía un gran río que pasaba muy cerca y que desagotaba en un lago", dijo Rougier a BBC Mundo.
"La cordillera de los Andes no se encontraba, los grandes ríos drenaban hacia el Pacífico, Sudamérica estaba conectada a la Antártida y ésta a su vez conectada a Australia. África se encontraba muy cerca de Sudamérica, no más lejos de lo que está hoy en día África de Europa, por lo cual el intercambio de fauna entre África y Sudamérica era posible. No sería nada raro que haya habido formas semejantes a Cronopio en África".
Separar los cráneos de la roca fue un proceso arduo.
"Cuando uno encuentra un fósil en el campo muchas veces sólo ve una pequeñita porción, así que lleva muchos años extraerlos de la roca. Nos llevó dos años sacar el fósil del bloque de roca, esto se hace bajo microscopio en forma manual, es un trabajo de joyería que se hace muy despacio. Los fósiles son muy frágiles y tienen que ser tratados con mucho cuidado".
En honor a Cortázar
El nombre Cronopio es un tributo al escritor argentino Julio Cortázar.
"Se refiere a unas criaturas extrañas que desarrolló durante muchos años y Cortázar mismo era llamado el Gran Cronopio. Le tengo un gran afecto, es un escritor que ha influenciado mi vida muchísimo. Éste es un mamífero extraño y decidimos llamarlo así como un homenaje a Cortázar y sus extraños Cronopios".
El descubrimiento de Cronopio, a nivel personal, muestra para Rougier que "hay que perseguir los sueños, porque yo quería ser un paleontólogo cuando era un niño pequeño y después de perseverar en el camino he conseguido hacerlo y estoy muy contento por ello".
Ser paleontólogo tiene, para Rougier, grandes atractivos. "A mí me gusta mucho la vida al aire libre, cuando vamos de campaña pasamos uno o dos meses en el campo en lugares agrestes a los que nadie iría si no fuera por un motivo como éste".
"Además, hay una búsqueda constante de algo significativo, que nunca se sabe exactamente qué es. Yo puedo ir a un lugar y sé que hay rocas apropiadas para encontrar fósiles, pero no sé lo que voy a hallar, no puedo predecirlo. Siempre hay un elemento de sorpresa, una incógnita".
Rougier señala que Cronopio tiene un mensaje para todos nosotros.
"Los mamíferos, nuestro propio linaje, es un linaje muy antiguo que vivió conjuntamente con los dinosaurios. Los mamíferos son un linaje arcaico que ha sobrevivido durante muchos millones de años en mundos muy diferentes", dijo el científico argentino a BBC Mundo.
"Nuestro universo ha ido cambiando a lo largo de cientos de millones de años y los linajes de mamíferos han ido cambiando, pero son el producto de un mundo en el cual los dinosaurios eran los seres dominantes y seguimos interactuando con ese universo cambiante".