http://www.cristianosgays.com/wp-content/uploads/2010/05/gay_couple.jpgEn un momento en el que el turismo homosexual está en auge, Argentina se sitúa a la vanguardia a nivel internacional y busca extender a todo el país el concepto que consolidó a Buenos Aires como capital gay-friendly de Latinoamérica.

Para ello, nada mejor que el Salón de Turismo de Cataluña, en Barcelona, ciudad que en los últimos años se convirtió en un

referente del turismo homosexual, desplazando en moda a las mecas europeas como Berlín y Ámsterdam.

Así, la Cámara de Comercio Gay-Lésbica Argentina (CCGLAR) se presentó con el mayor stand en el "Pink Corner", el espacio de la feria dedicado al turismo y ocio orientado al mercado homosexual.

"Queremos que todo el país sea reconocido como meca del turismo gay-lésbico y no solo Buenos Aires", dijo Pablo de Luca, presidente de la CCGLA.

Buenos Aires desplazó a Río de Janeiro como capital gay de Latinoamérica, "pero sólo es la puerta de entrada a un país que

ofrece muchas posibilidades", apuntó su pareja y vicepresidente de la CCGLA, Gustavo Noguera.

De Luca señaló que de los 5 millones de turistas que llegan cada año a la Argentina unos 900 mil son gays y lesbianas, es decir el 17,8%. Sin embargo, "solo un 35% se desplaza al interior del país, y creemos que se puede llegar hasta el 70%".

Así, ciudades como Mendoza, Iguazú, Bariloche, El Calafate y Mar del Plata están siendo promocionadas y cada vez más visitadas por ser considerados ya destinos amigables con la comunidad gay, ayudados por el impulso que dio la legalización del matrimonio igualitario en el país.

"Está claro que cuando te vas de vacaciones no querés ir a un lugar donde tengas que esconderte y no puedas ir de la mano de tu pareja. En ese sentido, uno busca un lugar donde se sienta aceptado", remarcó De Luca, especialista en Marketing y Turismo.

De Luca marcó las diferencias entre los distintos destinos: Berlín y Ámsterdam, las dos ciudades íconos de la movida gay de Europa, están identificadas con la libertad sexual, el arte y la tolerancia, pero funcionan más por barrios; al igual que El Castro

de San Francisco, en Estados Unidos, donde está concentrada la comunidad gay.

"En cambio, en Argentina pasa por otro lado, porque el gay no vive en un gueto sino que se mezcla. Este es el modelo por el que Buenos triunfó como destino gay en Latinoamérica y porque, a diferencia de Río de Janeiro, además de cultura, arquitectura y

gastronomía, ofrece seguridad".

El modelo de Buenos Aires se parece más al de Barcelona, donde la movida gay se funde con la ciudad y ha ganado protagonismo a través de la organización de actividades para la comunidad homosexual.

En ese sentido, Noguera informó que desde la CCGLAR están trabajando para que haya cuatro eventos gays importantes al año.

Dos ya se celebran: la "Vendimia gay" de Mendoza, que tiene lugar la primera semana de marzo y la "Marcha del Orgullo gay", el primer domingo de noviembre, que el año pasado reunió a 150.000

personas.

Para este año está previsto un crucero gay, que se realizará del 12 al 16 de diciembre, y que pretende contar con la mitad de

pasajeros locales y la mitad de extranjeros, y se está organizando una semana de actividades culturales y entretenimientos.

La International Gay & Lesbian Travel Association (IGLTA) pronosticó que el turismo homosexual es el que más va a crecer en

los próximos cinco años junto con el turismo de convenciones y reuniones.

A esto se le añade que el turista gay es un consumidor atractivo puesto que gasta más en sus viajes. "El gasto promedio en Argentina de los heterosexuales es de 120 dólares por día frente a los 200 dólares de los homosexuales", indicó De Luca, quien precisó que también tienen una estancia promedio del 40 o 50% superior.

(Télam)